La Web en Peligro
Sobre la urgente necesidad de protocolos Web P2P para hacer frente a las iniciativas gubernamentales que promueven la censura.
La tendencia actual de los gobiernos y corporaciones a restringir la libre expresión y la privacidad es un grave problema que amenaza los derechos fundamentales de las personas. Es necesario actuar para contrarrestar esta tendencia y promover un modelo económico que garantice la libertad de expresión y la privacidad de todos.
Gobiernos y corporaciones atentan contra la libre expresión y la privacidad
Leyes como la Directiva Europea de servicios Digitales (DSA), podrían tener un impacto negativo en la libertad de expresión en línea, al obligar a las plataformas a eliminar rápidamente el contenido que se considere ilegal. Esto podría conducir a la censura de contenido legítimo, ya que las plataformas tendrán que ser muy cautelosas para evitar ser sancionadas.
La Ley de Servicios Digitales (DSA) de la Unión Europea, que entró en vigor el 25 de Agosto de 2023, es un nuevo frente en la lucha por la libertad de expresión y la privacidad en el entorno digital. Esta ley hace responsables a las plataformas de contenido digital por las infracciones de sus usuarios, exige el filtrado automático de contenido ofensivo, so pena de multas hasta del 6 % de su facturación anual a nivel global.
En este sentido, el comisario europeo de Mercado Interior, Thierry Breton, ha afirmado que "Ahora las Plataformas Web son entidades reguladas del mismo modo que las instituciones financieras". Esta afirmación es preocupante, ya que sugiere que las plataformas de contenido digital estarán sujetas a las mismas restricciones que las instituciones financieras, lo que podría tener un impacto negativo en la libertad de expresión.
La presión sobre las empresas SaaS
Una de las maneras en las que los gobiernos están logrando controlar las actividades de los internautas es mediante la presión legal sobre las empresas prestadoras de servicios en la web, SaaS. Haciéndolas responsables penalmente por los presuntos delitos cometidos por los usuarios, éstas se ven obligadas a aplicar filtros automatizados de contenido y recolectar datos de las actividades de los individuos.
Estos filtros de contenido, conocidos como "censura algorítmica", pueden resultar en la restricción o eliminación de información legítima, así como en la creación de una visión sesgada de la realidad. Por ejemplo, una plataforma podría eliminar un video que critique a políticos o instituciones, por temor a que se considere “discurso de odio”. O bien podría eliminar una publicación con información que contradiga la narrativa oficial, por temor a que se considere “desinformación”.
Por otra parte, la recolección de datos personales pone en riesgo la privacidad de los usuarios, y podría ser utilizada para fines de vigilancia o marketing. Regulaciones como la DSA obligan a las plataformas a recopilar datos sobre las actividades de los usuarios para poder identificar y eliminar el contenido ilegal.
La necesidad de un modelo económico alternativo para la Web
Para contrarrestar esta tendencia, es necesario un modelo económico que incentive la cooperación espontánea y el mantenimiento de la infraestructura pública de las redes descentralizadas. Este modelo debe basarse en la colaboración entre usuarios, organizaciones y empresas, y debe garantizar la protección de los derechos fundamentales de las personas.
Por ende, hay que aumentar esfuerzos en desarrollar la Web Descentralizada, como una nueva forma de internet que se basa en redes P2P. En este modelo, no hay un servidor central que controle la información o los datos. En cambio, los datos se almacenan y distribuyen en una red de ordenadores independientes.
Las redes sociales descentralizadas, como el protocolo Nostr, permiten el intercambio de información de manera peer-to-peer, sin la necesidad de intermediarios. Esto las hace más resilientes a la censura y a la vigilancia.
La web descentralizada basada en redes P2P aún está en desarrollo, pero tiene el potencial de revolucionar la forma en que interactuamos con internet.